El Escarabajo de Oro es una de las obras más famosas del escritor estadounidense Edgar Allan Poe. Publicada en 1843, es un cuento corto que describe las aventuras de un grupo de buscadores de tesoros que intentan encontrar una fortuna escondida en algún lugar de la costa atlántica de los Estados Unidos. Su título original se debería traducir como “El insecto de oro” pero fue cambiada al «El escarabajo de oro» cuando se publicó en español en 1875.
Para el año de 1840, cuando Poe inició con la escritura de esta interesantísima historia, los cuentos y novelas de marinos, mapas y tesoros escondidos eran cosa común. Sin embargo, con su distintivo ingenio, presentó al mundo una versión innovadora que, a día de hoy sigue siendo una de las mejores.
La historia fue inspirada por un artículo sobre el criptograma que su autor leyó en un periódico en 1839 y se le ocurrió que un mapa rasgado (lo típico de la época) no era una manera eficiente de esconder un tesoro de forma segura. Pocos conocen que Allan Poe fue un especialista en encriptar y descifrar mensajes encriptados, y utilizó esa gran habilidad para diseñar un criptograma que los personajes de la obra debían descifrar para encontrar el tesoro. Una vez publicada la obra, el género de las novelas de aventuras cambió para siempre. Los mensajes cifrados, directos o indirectos, se hicieron cada vez más populares.
En la actualidad se sabe que “El Escarabajo de Oro” fue la primera obra de ficción en incluir un mensaje cifrado y, por lo tanto, la precursora de este recurso literario. En 1996, un equipo de buscadores de tesoros en Virginia afirmó haber encontrado la cueva donde se supone que está escondido el tesoro en la narración corta. Aunque no encontraron ningún tesoro real en la cueva, resulta interesante saber que se puede seguir la ruta descrita en la historia en la vida real.
Hemos preparado una interesante trivia con la que podrás poner a prueba tus conocimientos sobre la historia. Al finalizar, podrás tomar una captura de pantalla para compartir tus resultados con amigos o maestros. Si aún no has leído la novela, aquí te dejamos un enlace para que puedas adquirir una versión resumida que no pierde ningún detalle del contenido original.